El legado de la Laurenciana y el Campidoglio
El Renacimiento y el Manierismo en Italia produjeron obras que desafiaron la quietud y la proporción clásica. Entre estas, el Vestíbulo de la Biblioteca Laurenciana en Florencia, diseñado por Miguel Ángel, y la Piazza del Campidoglio en Roma, también obra suya, emergen como puntos de inflexión arquitectónicos. Ambas estructuras no solo resolvieron problemas funcionales y urbanísticos complejos, sino que establecieron un nuevo vocabulario espacial que influiría decisivamente en el Barroco. Este ensayo argumentará que estas dos obras utilizaron magistralmente la manipulación de la perspectiva y la tensión espacial para subvertir las expectativas clásicas, marcando la transición de la estática claridad renacentista a la dinámica teatral del Manierismo. El vestíbulo o ricetto de la Biblioteca Laurenciana (iniciado en 1524) es un ejercicio deliberado de tensión y antítesis. Miguel Ángel diseñó un espacio que intencionalmente frustra la lógica estructural renacentista. La habitación es not...
